lunes, 19 de marzo de 2012

Paraguay: diputados de la derecha dan vía libre a nueva oficina de Propiedad Intelectual

A pedido de Estados Unidos

 Saguier (izq.) junto a diputado oviedista David Ocampos analiza el proyecto de ley que crea nueva oficina de propiedad intelectual

Asunción.-La comisión de Ciencia y Tecnología de la cámara de diputados del Paraguay aprobó el proyecto de ley que creará la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (DINAPI), un ansiado pedido del gobierno de Estados Unidos a sectores de la derecha paraguaya.
Agustín Saguier,  actual director de la oficina de patentes y marcas, se presentó ante la comisión para analizar el proyecto presentado por los diputados Justo Cárdenas (Partido Colorado), David Ocampos de la Unión Nacional de Colorados Éticos (UNACE) y Sebastián Acha (Partido Patria Querida), todos representantes de la derecha.

Paraguay se encuentra monitoreada por los Estados Unidos que pretende la creación de una nueva Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (DINAPI) que reúna a la dirección de propiedad industrial DPI (marcas,  patentes y diseños industriales), los derechos de autor y a la Unidad Técnica Especializada (UTE), una especie de unidad de inteligencia, que tiene a su cargo la investigación de casos de piratería y falsificación.  El proyecto de ley presentado el 30 de noviembre de 2011 será debatido en el recinto parlamentario en los próximos días.
"Lo que tratamos con el señor Agustín Saguier es el Proyecto de Reforma y reestructuración de la Dirección Nacional de la Propiedad Intelectual. Como sabemos, en todo este tiempo, nuestro país no tiene la institucionalidad fuerte como para administrar la propiedad intelectual en todas sus expresiones: derecho intelectual, patentes, diseños, marcas. En el sentido de tener una dependencia del Estado súper profesional, porque así lo requiere", manifestó el congresista del partido UNACE de Lino Oviedo.
La creación del nuevo organismo le permitirá realizar convenios de cooperación con organismos internacionales como OMPI, o la USAID (tal como realiza actualmente), con especial énfasis en las políticas en contra de los medicamentos genéricos y normativas de fiscalización contra los comerciantes de la Triple Frontera Argentina- Brasil-Paraguay.
Asimismo, las atribuciones de un elevado grado de autonomía que quiere otorgarse al nuevo organismo le permitirá elevar proyectos de nuevas leyes de propiedad intelectual o coordinar negociaciones ante organismos extranjeros, a la vez que podrá disponer en una cuenta especial de los montos recaudados por las tasas pagadas anualmente por las empresas en concepto de patentes, marcas, diseños industriales o registro de contratos de transferencia de tecnología, además de la partida presupuestaria asignada.
El control de la  DINAPI es estratégico para los intereses de las corporaciones del entretenimiento, la música y la cultura, la industria farmacéutica, biotecnológica y electrónica, entre otras. 
La presentación de solicitudes de patentes contrasta con la magnitud del organismo que pretenden los Estados Unidos: según los últimos datos publicados por la Red Iberoamericana de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT), se presentaron en el Paraguay 11 pedidos de patentes nacionales y 249 extranjeras, lo que hace sospechar de una maniobra de la derecha paraguaya junto a empresas extranjeras para intentar sacar del mercado a laboratorios nacionales y eliminar al pequeño y mediano comerciante del país.