Autor: Agencias
A las 12 en punto, al grito de «manos arriba, esto es un atraco»,
los funcionarios irrumpen en los tres carriles de la Avenida
Castellana en cada dirección.
Durante los últimos días, el número de grupos de empleados que
interrumpen el tráfico durante unos minutos para protestar por la
política de hachazos dde Mariano Rajoy se ha multiplicado: “La
gente estaba dormida, pero cada vez sale más a la calle. Y esto es
solo el principio», asegura María José Torres, de 38 años y
empleada de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).